Durante la misma entrevista, Cuéllar fue interrogado sobre su conocimiento del caso La Bartolina, un predio ubicado en Matamoros donde, según la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), se han hallado al menos 500 kilogramos de restos humanos calcinados desde el año 2017. El vocero respondió: “No conozco La Bartolina. Nosotros atendemos siempre, no es por ocurrencia, es nuestro trabajo. No conozco La Bartolina”.
El desconocimiento generó indignación entre las familias de desaparecidos, ya que La Bartolina ha sido reconocida por autoridades federales como uno de los sitios de exterminio y cremación clandestina más grandes del país.
El reciente hallazgo en la ciudad de Reynosa volvió a encender la discusión sobre la existencia de sitios de exterminio en el estado. El colectivo Amor por los Desaparecidos informó que el pasado 10 de marzo localizó un predio con indicios de incineración de cuerpos humanos, donde se encontraron restos óseos calcinados, tambos metálicos, casquillos percutidos y 14 concentraciones de restos.
El hallazgo fue realizado durante una jornada de búsqueda en una zona de difícil acceso, tras recibir reportes previos. Según el colectivo, el sitio presenta las mismas características que otros puntos identificados en el estado como campos de exterminio utilizados por el crimen organizado para desaparecer personas.
Sin embargo, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas informó que se trata de un terreno propiedad de una funeraria en construcción. Cuéllar replicó esa versión: “Un campo de exterminio tiene otras características. Este lugar que llaman campo de exterminio es una construcción de una funeraria conocida allí en la frontera y, como lo dijo la fiscalía, no se encontraron restos ni olores fétidos ni ningún otro indicio que pudiera considerarse de esa manera. Se encontraron herramientas de trabajo propias de la construcción, está inconclusa, y eso fue lo que se encontró”.
Edith González, del colectivo Amor por los Desaparecidos, rechazó esa explicación y sostuvo que se trata de dos hallazgos distintos. “Sí se descubrió una funeraria, pero eso es otro asunto. El campo de exterminio que nosotros localizamos son restos óseos humanos calcinados. Este es otro tema. Son temas diferentes, hallazgos diferentes, contextos diferentes. El crematorio no tiene nada que ver con el sitio de exterminio que localizamos nosotros”, afirmó.
Añadió que el comunicado de la fiscalía “englobó varios hallazgos diferentes en uno solo”, lo cual genera confusión y desinformación. También explicó que el colectivo documentó el sitio con coordenadas georreferenciadas y evidencia física verificable.
El colectivo afirmó que ha identificado 19 puntos con evidencia de cremación de cuerpos humanos en distintos municipios del estado. González sostuvo que las declaraciones oficiales buscan desacreditar el trabajo de las madres buscadoras y minimizar la gravedad de la situación: “A la fiscalía también ya le rebasó esta problemática. Hemos encontrado tantos campos de exterminio que a la fiscalía ya sus capacidades ya no pueden atender todos estos sitios”.
Los colectivos reiteraron su exigencia de una reunión directa con el gobernador Américo Villarreal, a quien han solicitado audiencia desde hace meses. “Lo invitamos a que nos acompañe a fiscalía especializada y la fiscalía, a que le mostremos estos campos de exterminio localizados en estos últimos dos años porque tenemos evidencia”, dijo González.
Asimismo, denunciaron que muchos de los sitios identificados siguen sin ser intervenidos por falta de personal, recursos y voluntad institucional. Solicitó que el gobierno destine recursos y personal especializado para intervenir los puntos pendientes.