Por Diego Mendoza López
Senadores de distintos grupos parlamentarios arremetieron a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de mantener la inacción y “solapar” los hechos ante el hallazgo de un campo de exterminio en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, donde autoridades han localizado hornos crematorios y restos humanos calcinados.
Los representantes en la Cámara Alta del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Movimiento Ciudadano (MC) y del Partido Acción Nacional (PAN) denunciaron que el organismo no ha emitido ningún pronunciamiento público ni ha desplegado acciones para atender lo que calificaron como una violación grave a los derechos humanos. Durante la sesión del jueves en el Senado, el panista Juan Antonio Martín del Campo acusó que esta dependencia se ha convertido en “un florero” al servicio del gobierno en turno. En tanto, el discurso más feroz vino de la senadora Claudia Anaya, quien expresó que Piedra Ibarra ha traicionado a las víctimas y hasta a la propia lucha de su madre, la activista Rosario Ibarra de Piedra.
“No se caracterizó Rosario Piedra Ibarra en su primera gestión al frente de la CNDH por ser la activista o defensora más importante en este país de los derechos humanos y en su segundo período…tampoco. Ha seguido manteniendo un vergonzoso silencio ante los abusos de autoridad, lo que es indigno de una hermana de un desaparecido. Abandonar hoy a las víctimas y a las madres buscadoras es abandonar las causas que acompañó. Pareciera hoy más por un interés político que por darle seguimiento a una causa social”, sentenció la priista.
Por su parte, la integrante de MC en el Senado de la República, Alejandra Barrales, habló sobre una crisis de derechos humanos en el país y acusó que la CNDH no ha estado a la altura de los problemas. Además, señaló que la funcionaria ignora la crisis de desaparecidos:
“Lamento mucho que esta Comisión no esté actuando ni cumpliendo con su función (…). Estoy convencida que la Presidenta es sensible al dolor de estas madres buscadoras y podría ser un excelente vehículo la Comisión de Derechos Humanos para que se diera este acercamiento. Lamentablemente, pues es la propia presidenta de la CNDH quien no solo no está dando estas facilidades”, externó la mandataria en su intervención en el pleno.
El hallazgo en el Rancho Izaguirre, confirmado por la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas de Jalisco, reveló la existencia de al menos cuatro hornos crematorios artesanales, así de una nueva forma de “maquinaria” criminal del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Peritos forenses y autoridades federales trabajan en la recuperación y análisis del material óseo, aunque aún no se ha determinado el número total de víctimas hasta el momento.
Sobre esa línea, los legisladores propusieron emitir un punto de acuerdo para exhortar a la CNDH a intervenir de manera inmediata. Algunos incluso plantearon que el Senado evalúe el desempeño del organismo y su presidencia. “Lo que ocurre en Jalisco no puede tratarse como un caso más. El Estado mexicano tiene la obligación de investigar, sancionar y reparar”, añadieron.
Por ahora, la CNDH no ha emitido comunicado alguno o ha brindado mayor información sobre el caso.